Y, lo esencial para nosotros: los beneficios de toda esa gestión se destinan a programas de ayuda, a implantar un novedoso sistema de cuidado, que crea también bienestar y riqueza.
En la FAA queremos ayudar a los dependientes pero también a sus familiares, para mejorar su día a día, para alcanzar una vida propia y plena. Y que ese beneficio se extienda más allá, a las zonas donde viven.
Cambiando la forma de entender la atención, podemos atraer y asentar población en lugares despoblados (en nuestra España Vaciada), dinamizar territorios y crear puestos de trabajo y nuevas líneas de desarrollo.